Las Cosas de la Política
El “NO OIGO” expresado por Andrés Manuel López Obrador en su mañanera en respuesta a la pregunta sobre la violencia y la muerte de cinco jóvenes de Lagos de Moreno Jalisco, es la muestra de su verdadera personalidad, de su verdadero rostro, perversidad y calidad humana.
Ese “NO OIGO” es la constante de su sordera generada por su rencor, su soberbia y ambición de poder que raya en la demencia, es respuesta permanente en todo lo que le dicen, en las decisiones que importan y se deben de tomar en beneficio de los mexicanos y el país que mal gobierna, lo expresa de muchas maneras, pero en su ser interior el mismo se responde y se asegura de no escuchar y justificar su desprecio a todo y a todiguelos los mexicanos.
Si hablamos del sistema de salud, de la pandemia y la vacunación, del desabasto medicamentos, de los niños con cáncer, de la desaparición del seguro popular y el fracaso del INSABI, del colapso en los servicios del IMSS e ISSTE, también recordemos la cancelación de las estancias infantiles, la demanda de las madres buscadoras, de las familias de los desapararecidos (en su gobierno), podemos hacer una larga lista y él seguirá diciendo “NO OIGO”.
Si hablamos de corrupción, ahí tenemos a SEGALMEX, PEMEX, CFE, AIFA, DOS BOCAS, TREN MAYA y su entorno familiar (Andy y José Ramón principalmente), la lista de actos de corrupción también es larga y los nombres de quienes lo hacen es grande y todos de su confianza, pero él grita “al ladrón, al ladrón “ del pasado, el presente no existe, su corrupción pretende taparla con la impunidad por decreto, habla de moral y humanismo y pisotea los derechos humanos y voltea la vista ante los evidentes actos de corrupción de su gabinete y claro en este tema solo tenemos su respuesta “NO OIGO”.
La violencia ya califica al gobierno de López Obrador como el más sangriento de la historia, las cifras del número de asesinatos ahí esta con “sus datos”, la verdadera numeralía será muy alta, pero bueno, él no escucha y solo responde “abrazos, no balazos”, mientras entrega el territorio mexicano al crimen organizado, la sensación de que es un narco gobierno cómplice tiene sus ejemplos y es el propio Andrés Manuel el que lo confirma con sus respuestas y sus ordenes que favorecen al incremento de la violencia y el empoderamiento de estos grupos.
México merece vivir en paz, en armonía, buscar el desarrollo y la prosperidad, se debe respetar la constitución y sus leyes, sí, esa constitución que AMLO juro respetar y ahora pisotea, cree que compra conciencias y lealtad con dádivas, la realidad es diferente, hay miedo en muchos sectores sociales, en muchas familias, hay una nueva oligarquía, hoy retumba en Mexico la respuesta de Andrés Manuel López Obrador ante lo que pasa… NO OIGO
PD. Hay un camino para rectificar y la responsabilidad estan en nosotros y debe de ser por la vía democrática, debe de ser por el VOTO, no se debe permitir que el ” NO OIGO sea también nuestra respuesta.