Al Atlas solo le bastó una jugada dentro del área para llevarse los tres puntos y obtener su primera victoria como visitante desde abril del año pasado. Además, sanó la herida que le dejó la derrota en el clásico tapatío la semana anterior. Todo gracias a una jugada en la que Fidel Martínez aprovechó la mala marca de Alan Mendoza para recibir un centro y, tras un par de rebotes afortunados, disparar casi a quemarropa de Jesús Corona.
El gol del ecuatoriano congeló a los cementeros que hasta ese momento dominaban. No eran muy peligrosos pero mantenían alejados de su portería a los tapatíos y la ofensiva estaba encima del marco de Óscar Ustari, quien tuvo que salir de cambio debido a una lesión en el codo izquierdo.
Los celestes salieron revolucionados para la parte complementaria en busca del tanto del empate pero la gran virtud del Atlas fue la solvencia defensiva, un trabajo impecable que le cortó casi todos los circuitos al local. Paco Jémez se la jugó metiendo otro delantero y dejando solo a tres zagueros. Pero la fórmula no le funcionó que experimentó su primera derrota como local, tras una victoria y varios empates.
Los rojinegros terminaron replegados mientras la Máquina intentaba atacar por todos los sectores. Pero nada le salió: Cauteruccio remató al poste y todavía en una jugada individual de Jorge Benítez, el portero Miguel Fraga salvó el tanto del empate al taparle con el pie un disparo cruzado al minuto 89.
El duelo terminó con un Jémez desesperado, manoteando y recriminando a sus jugadores, y una afición molesta que despidió a los jugadores entre abucheos y gritos, y que poco a poco se comienza a desencantar del cuadro azul que levantó mucha expectativa al principio del torneo.
Con la derrota Cruz Azul se quedó en seis unidades y por el momento ocupa el lugar 15 de la clasificación, mientras que los rojinegros sumaron 10 unidades y saltarán hasta la novena plaza, faltando todavía los resultados de Necaxa, América y Querétaro.
Vía Medio Tiempo